Antigua finca agrícola en Elda, la "Finca Lacy"

Esta antigua finca agrícola, ahora instalada en el centro de un polígono industrial, era en el siglo XVII, lugar de trabajo temporero en la recogida de la aceituna de los, se estima, mas de 6000 olivos que cubrían esta hacienda. Lugar de visita y recreo de unos pocos, nos muestra las ruinas de su pasado, su belleza nos envuelve y muestra su presente mas desolador y triste, una vez mas, no sabemos cuidar lo hermoso, nos molesta la historia y queremos romper con ella, viviendo lo efimero de nuestra realidad como lo unico que vale la pena, sin darnos cuenta que sin "aquello" seria imposible "esto".

Restos de un cuartel militar abandonado...

 Búnkers abandonados, 90 años de historias corren por estos campos, 1200 militares vivían, dormían y jugaban a la guerra...

 La zona de oficiales tenia otro aire, césped, una piscina y zona de sombra, hacia la vida mas fácil y distinguía a la tropa de los mandos, siempre y en cualquier lugar el que manda ha tenido mas...

 Si permaneces pegado a sus paredes y cierras los ojos, aun oyes el eco de los tiros...

 El bar de la tropa ahora es una estancia donde los últimos rayos de sol, dejan ves las sombras del pasado, risas, sueños, conversaciones, humo, vasos y alcohol inundaban esta estancia...

Garitas o torretas de vigía, cubren el perímetro del cuartel, ahora como reliquia de tiempos pasados se mantienen anclados en su propio olvido

Campo, tierra, el sol cae y acaba un dia, pero mañana la luz volvera a inundar estas ruinas del pasado, se silencian las historias y llega la oscuridad, pero mañana otra vez los rayos del sol, nos dejaran ver y oir historias de compañeros y personas, que quizas a cientos de kilometros de sus casas, vivian, sufrian y con toda seguridad soñaban.

Piezas sueltas...

 Hace ya tiempo, me encargaron un trabajo, un  zapato, una horma y un porta minas, me gustaron las formas...

Llaves viejas, oxidadas, muy grandes y como siempre llenas de historias. Esta foto la hice en una casa muy antigua, llena de piezas unicas y de recuerdos, muchos recuerdos.

 

En el jardín, también habían muchas cosas, entre ellas me llamo la atención, en un rincón y medio tapada por una vieja puerta, esta bicicleta, antigua, como todo lo que allí dormía, porque eso parecía, que todo permanecia como dormido en el tiempo, allí no había prisa, todo era en blanco y negro.

Moros y Cristianos, eran tiempos de guerra ahora motivo de Fiesta...

Lo que antaño fue sangre y lucha, ahora es regocijo y fiesta. estaria bien que de vez en cuando nos paráramos a pensar el porque de las cosas, el porque de los ritos. En la mayoria de los casos el fracaso del ser humano en busca de no se sabe que, hace que queramos poseer, que queramos acaparar cuanto mas mejor, que queramos poder sobre todo y todos. No sabemos a donde vamos ni lo que buscamos, primero fueron piedras, mas tarde espadas, después vinieron las primeras armas de fuego y por fin descubrimos que para aniquilar sobra con apretar un botón.

Ya esta, ya tenemos poder de acabar con todo y con todos, y ahora a invertir en amontonar cuanto mas poder de destrucción mejor. Si esto es el fin de nuestra busqueda...vaya perdida de tiempo, vaya fin mas pobre. La fiesta esta bien, pero en el desván de todo eso, siempre esta el fracaso del ser humano en la búsqueda de no se sabe que.

Una estación de tren es el inicio y el final de muchas historias...

Nunca busco nada, pero las imagenes surgen así como las historias que emanan de ellas, susurros y gritos, risas y lágrimas, y a ti, que te cuentan. Seguramente que depende del momento, de tu estado anímico, de tu saldo bancario, de ti.
No trato de buscar la perfección fotográfica, que por otra parte no existe, solo trato de que las imagenes te cuenten cosas, te susurren historias...las tuyas.
Seguro que alguna vez fuiste a una estación de tren y cogiste uno, quizás te paso algo en le trayecto, llovia, era de noche, te esperaba alguien en tu destino, fue hace ya mucho tiempo o simplemente fuiste hace un mes en ese tren tan chulo a un concierto a la capital.
Siempre siempre hay historias, las tuyas.

Una forma de ver Mallorca...

                                                                   fotografia: Marcela

Cada rincón, cada esquina, diferentes formas de ver una misma cosa, otra vez piedras, fachadas, ventanales, balcones, naturaleza, todo nos habla de historias y vivencias, nos evoca un pasado lejano, aveces no tanto y otras en cambio nos acerca a la realidad diaria, nos guste o no. Tambien nos emcontramos con imagenes que nos hablan de historias de lucha y guerras mezcladas con paisajes de sol y felicidad. Que mezcla tan bestial, pero todo esta ahi, solo hay que mirar...

Piedra y hierro...

Hay pocas cosas que hablen mas de nosotros y de nuestra historia, que las viejas piedras y los gruesos forjados de hierro que hacían de murallas infranqueables.